En memoria de Federico Mayor Zaragoza, socio de honor de UN Etxea
Con profunda tristeza y un gran sentido de gratitud, despedimos a Federico Mayor Zaragoza, socio de honor de UN Etxea, quien dedicó su vida al servicio de la humanidad. Su legado trasciende generaciones y fronteras, marcando un camino de compromiso, sabiduría y esperanza.
Federico Mayor Zaragoza destacó como bioquímico, un campo en el que demostró una extraordinaria capacidad académica y de investigación. Su compromiso con la ciencia y la educación lo llevó a convertirse en rector de la Universidad de Granada, donde promovió el conocimiento como herramienta para el desarrollo humano y social. Posteriormente, en su papel como ministro de Educación y Ciencia en España, trabajó incansablemente para mejorar el acceso y la calidad de la educación, entendiendo que esta es la base de toda sociedad justa y equitativa.
Si hay algo que definió a Federico Mayor Zaragoza fue su compromiso con la cultura de paz. Fundador de la Fundación Cultura de Paz, dedicó su vida a promover el diálogo, el entendimiento mutuo y la resolución pacífica de conflictos. Fue un firme defensor del multilateralismo y la cooperación internacional, recordándonos siempre que «es tiempo de acción, tiempo de responsabilidad». Su visión de un mundo donde la justicia, la igualdad y la solidaridad prevalezcan sigue siendo una guía para todos nosotros.
De sus grandes aportes al humanismo y al multilateralismo global en Euskadi tenemos mucho que agradecer. Fue en 1997, siendo él Director General de la UNESCO y Jose Antonio Ardanza (también Socio de Honor de UN Etxea y fallecido este mismo año) lehendakari del Gobierno Vasco, cuando firmaron el primer Memorándum de Entendimiento entre una Agencia de la ONU, la UNESCO, y un gobierno subestatal. Un acuerdo que facilitó un acercamiento entre Euskadi y la ONU, poniendo en marcha, entre otros el programa de becas ONU.
En UN Etxea, tuvimos el honor de contar con Federico Mayor Zaragoza como socio de honor, un reconocimiento a su trayectoria y a los valores que compartimos. Nos ha acompañado en cada momento de la organización, reconociendo nuestros esfuerzos por impulsar la cultura de paz, los derechos humanos y el desarrollo sostenible. Siempre nos ha orientado y apoyado.
Nos sabemos parte de su legado global y por eso, hoy, rendimos homenaje a un gran hombre que dedicó su vida a construir un mundo mejor.
Descansa en paz, querido Federico. Tu voz seguirá resonando en cada paso que demos hacia un futuro más humano y sostenible.
Con gratitud y admiración,
UN Etxea